El trabajo de masterización se refleja en que todas las pistas de un álbum suenen de forma acorde y balanceada. La masterización es el último paso de la post producción de audio y tiene como objetivo balancear todos los elementos sonoros de una mezcla estéreo y optimizar la reproducción de todos los sistemas y formatos.

La masterización se realiza utilizando herramientas como la compresión, la ecualización, la expansión y limitación. De no hacer esta masterización, algunos tracks pueden sonar desacordes en comparación a los demás.